En su libro
“Aprender a pensar”, Edward de Bono nos explica algunas de las técnicas
utilizadas en su programa “CORT THINKING”, sobre el desarrollo del pensamiento.
El método CORT
puede ser visto como el “método de las gafas”. Si una persona es miope y le das
las gafas apropiadas, podrá ver más y con mayor claridad. Las técnicas de
pensamiento, como el PNI, desempeñan la función de las gafas al permitirnos ver
con mayor claridad y amplitud. Después, reaccionaremos ante lo que encontremos.
CORT proviene de
Cognitive Research Trust que, en español, correspondería a Fundación para la
Investigación Cognitiva.
Aquí, les
presento la primera:
PNI = Positivo, Negativo, Interesante (En el idioma inglés, se conoce
por PMI = Plus, Minus, Interesting)
P
significa Positivo, los puntos a
favor, lo que nos gusta, lo que nos parece bien.
N
representa lo Negativo, los
elementos en contra, los inconvenientes.
I
se refiere a lo que puede ser Interesante,
o los puntos a tener en cuenta.
Para aplicar la
técnica PNI, partimos del enunciado de un problema, una situación o una
sugerencia. Cuando se está aprendiendo a trabajar con el PNI, algunos de los
ejercicios pueden ser imaginativos, exagerados o sobre cosas poco trascendentes.
Una vez familiarizarnos con la técnica, podremos aplicarla cuando lo estimemos
conveniente.
Cuando hacemos un
PNI dirigimos nuestra atención en varias direcciones, de forma deliberada, como
cuando estamos en medio de un paisaje y tratamos de abarcar todo lo que podamos
encontrar a nuestro alrededor, con la mirada y la imaginación.
En un principio,
prestaremos atención hacia todo lo que nos pueda parecer Positivo con respecto a la situación planteada, y anotaremos todas
las ideas que se nos ocurran. A continuación, nos fijaremos en lo Negativo, en los aspectos oscuros, en
los inconvenientes y en todo lo malo que se nos pueda ocurrir. Finalmente,
habremos llegado a la parte que a mí me gusta más, por ser inusual:
Centrarnos en lo Interesante, agrupando todos los puntos
y comentarios que no sean positivos, ni negativos y señalando lo que puede
haber de interesante en el planteamiento. Registraremos todo lo que este tema
nos pueda sugerir, las dudas que nos gustaría resolver y las soluciones que
podría brindarnos. Lo que nos motiva y lo que nos llama la atención. Así mismo,
veremos cómo nos puede llevar a nuevas ideas o a resolver otros problemas.
Conviene señalar
que, si un punto en particular se ve como positivo y como negativo, debemos
incluirlo bajo ambos encabezamientos.
Algunas veces, se
nos ocurrirán muchas ideas y, en otras ocasiones, muy pocas. En una columna,
podemos tener dos o tres y, en otra, diez o más. No le demos importancia
alguna, lo fundamental será que nos centremos en cada uno de los tres puntos,
de forma consecutiva. Sin juicios y sin elaborar las ideas, por muy absurdas o
descabelladas que puedan parecer. No es el momento de criticarlas, ni el de
rechazarlas o mejorarlas. Deberemos tomar nota de todas las ideas que se nos
ocurran, tal como suele suceder en el ejercicio del más ortodoxo “Brainstorming”.
Habitualmente, cuando
nos hacen una pregunta, o nos piden que digamos lo que pensamos sobre un tema, existe
la tendencia a tomar posición a favor, o en contra, sin haber explorado y
profundizado suficientemente en el mismo. Luego, buscamos argumentos para
sustentar lo que hemos dicho en un principio, y rechazamos todo aquello que nos
parece improcedente. Sin embargo, en el caso de aplicarle un PNI a la situación
expuesta, nos sorprenderíamos con algunas de las ideas que podrían surgir.
Para que haya una
mayor claridad en cuanto a esta técnica, desearía exponerles las respuestas que
dieron, al ejercicio, algunos alumnos de la Facultad de Ciencias.
Suponga que le
piden desarrollar un PNI para explorar una atractiva propuesta: Hay que pintar todos los automóviles, de
color amarillo.
P
-
Se verán más
fácilmente en las carreteras.
-
Será más fácil
verlos de noche.
-
Se terminaría el
problema de decidir qué color te gusta.
-
No habría que
esperar obtener el color deseado.
-
Se simplificarían
las cosas para el fabricante.
-
El concesionario
necesitaría menos stock de unidades.
N
-
Sería aburrido.
-
Nos sería difícil
localizar el coche en un aparcamiento.
-
Sería más fácil
robar coches.
-
El exceso de
amarillo podría cansar los ojos.
-
A la policía le
resultaría difícil perseguir a los coches.
-
Los testigos de
accidentes lo pasarían muy mal.
-
Se restringiría
tu libertad de elección.
-
Algunas empresas
de pinturas quebrarían.
I
-
Sería interesante
ver si surgían diferentes tonos de amarillo.
-
Se podría ver si
la gente aprecia el factor seguridad.
-
Serviría para ver
si cambian las actitudes ante los coches.
-
Sería interesante
ver si sería aplicable.
-
Podríamos ver
quién apoyaría esta sugerencia.
Hacer un PNI, es
sencillo. Sin embargo, resulta más complicado dirigir la atención en una
dirección, después de otra, cuando nuestros prejuicios ya han decidido lo que
sentimos, ante una idea. Lo importante es
esa “voluntad” de mirar en una dirección. Una vez logrado, el desafío
natural de la inteligencia consiste en encontrar tantos puntos Positivos, Negativos
o Interesantes, como se puedan.
El PNI puede ser
utilizado individualmente, o en grupo. De todas formas, si se utiliza en grupo,
es preferible que, primero se realice un trabajo individual, donde cada uno
dedique unos minutos a buscar las ideas que se le ocurran y, a continuación, se
expongan las diferentes ideas al grupo. En cada caso, se dedicarán unos tres
minutos para el ejercicio completo.
Con el objeto de
practicar, sería bueno que hicieran un PNI con cada uno de los tres ejercicios
siguientes:
Todos deberían llevar un botón donde se
indique su estado de ánimo.
Cada niño debería adoptar a una persona mayor
a quien cuidar.
El matrimonio debería ser un contrato
renovable cada cinco años.
Sería interesante
que compartieras con nosotros cómo te sientes, después de haber hecho el
ejercicio. Si te ha sorprendido, si los resultados fueron diferentes a la
primera idea que se te ocurrió, cuando leíste el planteamiento.